¿Cómo asegurar tus prendas de vestir?

¿Qué cubre la Póliza de Hogar?

La Póliza de Hogar (enlazar con la póliza de hogar) está diseñada para la protección del patrimonio familiar, es decir la vivienda y sus contenidos, como la ropa, frente a los riesgos a los que se encuentren expuestos tales como incendios, desastres de la naturaleza (terremotos, inundaciones, vendavales), y actos mal intencionados de terceros, entre otros.

Teniendo en cuenta que las pólizas operan sobre la base del costo de reemplazo, una buena idea es tomarte un momento para evaluar cuánto costaría reemplazar los artículos en tu armario, en el caso que los fueras a comprar nuevamente.

Generalmente, la cantidad estándar de cobertura para posesiones, incluida la ropa, es del 50 al 70% del seguro que tienes en tu hogar. Puede que esto no sea un seguro suficiente para las personas con un interés especial en la ropa, por lo que es importante evaluar exactamente cuánto vale las prendas que guardas en tu armario.

Las compras también se pueden proteger

¿Sabías que cuando vas de compras, los artículos que adquieras, como las prendas de vestir también las puedes proteger con un seguro? La respuesta es sí. En el mercado de los seguros existe también la Póliza de Compra Protegida (enlazar con esta póliza), la cual está diseñada para cubrir contra hurto y daño accidental a las compras realizadas en un periodo de tiempo.

¿Qué prendas puedes asegurar de tu armario?
 

1. Los vestidos, chaquetas y sacos son prendas por las cuales tuviste que hacer un esfuerzo económico, que en un caso fortuito podrías recuperar.

2. Los zapatos, generalmente en nuestro armario guardamos con mucho aprecio aquellos que tenemos destinados para ocasiones especiales. La mujer promedio posee 17 pares de zapatos. Sin embargo, vemos a menudo colecciones que superan esta cantidad, y si haces la suma ¡te puedes sorprender!

3. Los bolsos para las mujeres son de las prendas más apreciadas por su utilidad, y casi siempre se hace una buena inversión porque hacen parte de nuestra presentación personal en el trabajo y en los eventos especiales. 

4. Las maletas de viaje se han convertido en parte indispensable de nuestro armario. Hoy en día viajar es más fácil, lo que nos permite salir con mayor frecuencia. Invertir en una maleta que sea resistente y de buen material, vale la pena. 

5. Los trajes que compraste para alguna fiesta o aquel cuando fuiste a tu destino favorito y te encanto, pueden pasarse por alto fácilmente, especialmente si se guardan en fundas de almacenamiento. 

Saca un rato un fin de semana y revisa aquellos trajes que guardas con tanto aprecio y recuerda cuánto te costaron. Con este ejercicio te vas a dar cuenta que tienen un valor monetario representativo.

Si has llegado hasta aquí, anímate, abre la puerta de tu vestier o de tu armario y empieza a evaluar tus prendas y consulta con tu asesor de seguros, para que te indique la mejor forma de asegurar tu hogar y todo su contenido, incluyendo la ropa, los zapatos, los bolsos y las maletas de viaje.