Un negocio es una inversión, por lo que la seguridad ante imprevistos es uno de los factores importantes a considerar para su éxito y permanencia en el mercado. Aunque muchas PyMES lo perciben como un gasto postergable, es muy recomendable considerar que un seguro se puede adaptar a las características y necesidades específicas de cada pequeña o mediana empresa. 

“El riesgo de perder todos los activos y el capital de trabajo producto de un siniestro puede convertir un seguro en algo prioritario y la única opción de continuar con las operaciones”, dice Karen López, Gerente de PyME de Chubb, una de las principales aseguradoras de Chile en la actualidad. 

Al momento de contratar un seguro y, aunque parezca obvio, un excelente consejo es analizar si se está adquiriendo lo necesario y, antes de firmar un contrato, revisarlo a fondo. Para ello, es importante elegir una aseguradora que genere confianza, que cumpla y ofrezca lo que el negocio necesita.

 “De acuerdo a nuestra experiencia, las PyMES ven con mayor preocupación que les roben a sufrir los efectos de un desastre natural. Sin embargo, muchas pequeñas y medianas empresas tienen créditos, los cuales tienen asociadas pólizas de incendio y sismo (que protegen el compromiso adquirido con el banco) y no saben que pueden, por un costo marginal, agregar cobertura de robo”, explica Karen López.

Seguros a la medida

Es importante tener claro que no es lo mismo contratar un seguro para un colegio o una universidad, que podría estar interesado en asegurar el mobiliario de su biblioteca o la responsabilidad civil que tiene sobre sus alumnos tras un siniestro, que para un restaurante, en el que ante el incendio de su cocina tendría que paralizar su operación hasta ser capaz de retomar su actividad.

La diferencia entre una aseguradora y otra radica en ser capaz de identificar específicamente lo que necesita cada PyME, para ofrecer la cobertura adecuada de acuerdo a cada contexto. 

Estructura y contenido

“Al momento de asegurar una empresa, es necesario distinguir entre cobertura de Estructura y de Contenido. Por eso es muy importante contar con la asesoría de una corredora de seguros y la información correcta de la cobertura para entender claramente lo que se está resguardado”, explica la ejecutiva de Chubb.

¿Cuál es la diferencia? En el caso de la cobertura por Estructura, se protegen los espacios físicos de la propiedad donde opera el negocio, como las salas de reunión, escaleras, accesos, pasillos, recepciones, etc., pero no los insumos que se encuentran dentro de estos espacios, como computadoras, equipos, instrumentos técnicos y otros activos. Para esto es necesario adquirir la cobertura de Contenido.

Para entenderlo mejor: en un edificio que cuenta con una póliza de incendio, opera una consulta médica. Pensemos en un dentista, que está tranquilo porque el edificio en el que arrienda su consulta está asegurado contra incendio. En caso de siniestro, él podrá volver a su consulta sin pagar por los daños de la estructura, sin embargo, la máquina de las radiografías, la silla médica y los utensilios sólo estarán cubiertos si cuenta con una cobertura de Contenido. En cambio, en el caso de una sicóloga, la estructura (su oficina o despacho) pueden tener mayor relevancia de cobertura que el contenido, dado que los servicios que presta son intangibles, y pueden depender fundamentalmente de su presencia.

Paralización del negocio producto del siniestro

Otro adicional muy importante a considerar es el denominado Perjuicio por Paralización. “Para las pymes es fundamental tener respaldo económico durante el período en que no podrán funcionar normalmente producto del siniestro, pero donde persisten las obligaciones de pagar sueldos, cuentas y otros egresos. Este período de paralización a cubrir por el seguro es establecido por el propio cliente, de acuerdo a sus necesidades.” dice Karen López.

De acuerdo a Chubb, el aumento del valor de una póliza de incendio para una pyme al incluir la cobertura adicional de robo puede aumentar entre un 10% y un 20% de la prima. “Esto está directamente relacionado al monto asegurado de la empresa. Si bien son valores importantes para el presupuesto de cualquier pyme, el costo de un siniestro puede ser aún más caro. Afortunadamente, el mercado asegurador chileno se ha sofisticado mucho en este aspecto y es capaz de diseñar pólizas específicas para la necesidad y tamaño de cada empresa”.